Todos estamos familiarizados con el término 3D gracias al auge que le dio al cine y que todos relacionamos con esas gafas rojas y azules. Sin embargo, esta tecnología va más allá y tiene muchas más funcionalidades.

¿En qué consiste el 3D?

La tecnología 3D es una herramienta que permite crear y modificar objetos tridimensionales. También puede utilizarse para crear imágenes realistas de objetos que no existen en la vida real, como dinosaurios, planetas o incluso personas.

Hay muchos tipos de tecnología 3D que se utilizan hoy en día. Algunas se aprovechan con fines de entretenimiento (como los videojuegos o las películas), mientras que otras se emplean para la investigación científica (por ejemplo, la obtención de imágenes con fines de diagnósticos médicos). Pero tanto si se trata de crear sesiones de realidad virtual, como de diseñar nuevas herramientas quirúrgicas, la tecnología 3D puede ser una herramienta increíblemente poderosa para hacer que las cosas sucedan.

Pero también ha llegado al terreno físico gracias a la Impresión 3D, la cual utiliza una máquina llamada impresora para crear objetos mediante capas de material plástico fundido. Cada capa se construye sobre la otra hasta completar el objeto.

Industrias que utilizan la tecnología 3D

La industria del automóvil lleva décadas aprovechando el potencial de la impresión 3D. La impresión 3D es extremadamente útil en la creación rápida de prototipos y ha demostrado ser capaz de reducir significativamente los tiempos de diseño y los plazos de entrega de nuevos modelos de automóviles.

En cuanto a la impresión 3D está provocando una revolución en el diseño de joyas. Crear piezas impresas en 3D que tuvieran un aspecto y un tacto comparables a los de la joyería tradicional hecha a mano y fundida solía ser un reto. Sin embargo, tras los últimos avances en los programas especializados de modelado 3D de alta gama, y con una mayor oferta de materiales imprimibles, cada vez son más los diseñadores de joyas que prefieren modelar e imprimir sus diseños en 3D en lugar de los métodos artesanales tradicionales.

Además, el menor volumen de componentes necesarios en la construcción de una pieza impresa en 3D hace que las piezas sean más ligeras en general y ha permitido a la industria aeroespacial realizar un ahorro considerable. Este cambio aparentemente pequeño en la producción afecta positivamente a la carga útil, las emisiones y el consumo de combustible de un avión, así como a la velocidad y la seguridad, al tiempo que reduce notablemente los residuos de producción. Como en muchos otros campos, el flujo de trabajo también permite la producción de componentes demasiado complejos para los métodos tradicionales.

La odontología también ha sido uno de los usuarios más destacados de la impresión 3D. Las impresoras 3D de sobremesa son una visión cada vez más común en los laboratorios y consultas dentales. De hecho, los populares alineadores transparentes, termoformados en moldes impresos en 3D, son posiblemente el uso más exitoso de la impresión 3D que hemos visto hasta la fecha.

Por último, la arquitectura, un sector que ya se basa en el diseño geométrico, la creación de prototipos y el modelado, puede beneficiarse enormemente de los avances de la tecnología de impresión 3D. Hemos visto que el flujo de trabajo digital produce complejos modelos arquitectónicos a escala con todo detalle, mejorando la fase de modelado 3D del diseño arquitectónico.

Formarte como animador 3D

Si el mundo de la animación 3D te llama la atención, debes saber que tienes la oportunidad de formarte como animador 3D y conviértete en Técnico Superior en Animación 3D, Juegos y Entornos Interactivos.

Ofrecemos un programa de formación completo para cualquier persona a la que le apasione la animación 3D y quiera desarrollar más sus habilidades. Puedes obtener más información sobre esta apasionante carrera profesional consultando nuestra página web hoy mismo.