Pirámide de la dieta equilibrada
En los últimos años se ha experimentado un crecimiento en el interés por la vida sana. Desde practicar todo tipo de deportes hasta cuidar la alimentación, existen muchos hábitos saludables que nos permiten cuidar diariamente nuestra salud. Una de las herramientas más conocidas para ayudarnos a identificar qué alimentos son beneficiosos y cuáles debemos restringir es la pirámide de la dieta equilibrada o pirámide alimenticia. ¿Es recomendable tomar carnes rojas más de dos veces por semana? ¿Quieres saber qué cantidad de dulces y alcohol es recomendable no sobrepasar semanalmente? ¿Cuánta actividad física es aconsejable practicar diariamente? Sigue leyendo este artículo porque te vamos a presentar los distintos escalones de la pirámide de la dieta equilibrada con sus correspondientes alimentos y hábitos saludables para que no tengas excusas a la hora de cuidar tu salud.
¿Qué es la Pirámide alimenticia?
La pirámide alimenticia es una herramienta dirigida a la población con el objetivo de servir de guía para promover la práctica de actividades físicas y la alimentación saludable. En España contamos con la pirámide alimentaria de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), la cual nos sirve de referencia de cara a conocer qué alimentos son los que no deben faltar en una dieta equilibrada y cuáles son los que tienen que ser consumidos de una forma ocasional.
Partes de la pirámide alimenticia
La pirámide alimenticia de la SENC está estructurada de tal manera que, en su base, podemos encontrar consejos para mantener un estilo de vida saludable y los alimentos que deben incluirse en cada comida principal. Según vayamos subiendo escalones se nos presentarán aquellos productos cuyo consumo debemos ir moderando, hasta que llegue a ser ocasional.
A continuación vamos a presentar brevemente cada uno de los pisos de la pirámide de la dieta equilibrada.
- Primer piso: hábitos saludables
El escalón de los hábitos saludables es una novedad que ha recogido la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria con la intención de que conozcamos algunos ejemplos de vida sana como, por ejemplo, mantener un equilibrio emocional, beber de 4 a 6 vasos de agua al día o realizar una hora de actividad física diaria.
- Segundo piso: alimentos integrales y ricos en hidratos
En el segundo piso encontramos todo tipo de pastas, harina, productos integrales, patatas, castañas, legumbres, cereales o arroz. Todos ellos se caracterizan por contener una alta cantidad de carbohidratos, por lo que son ideales para aportarnos la energía diaria que necesitamos.
- Tercer piso: verduras, hortalizas y frutas
Dentro de los alimentos que no deben faltar en nuestras comidas principales destacan las verduras, hortalizas y frutas por ser una gran fuente de minerales, vitaminas y fibras. Se recomienda tomar, como mínimo, de 2 a 3 raciones de verduras y hortalizas al día y de 3 a 4 de frutas. Además, el aceite de oliva virgen extra también deberá formar parte de nuestra dieta diaria.
- Cuarto piso: alimentos de consumo moderado
Los productos incluidos en los pisos quinto y sexto son aquéllos cuyo consumo debe moderarse. Algunos ejemplos son los lácteos, con un máximo de 3 raciones diarias, huevos, frutos secos, carnes blancas o pescados, cuya recomendación es alternarlos de manera que los tomemos de 1 a 3 veces al día.
- Quinto piso: carnes rojas
Las carnes rojas, como la ternera o el cordero, las carnes procesadas o los embutidos también deben figurar de manera ocasional en nuestra dieta.
- Sexto piso: dulces y bollería
Por último, la pirámide de la dieta equilibrada se corona con el piso de los dulces, la bollería, las grasas y los snacks. A pesar de que estos alimentos son muy apetecibles, es aconsejable que se disminuya su consumo, al aportar una cantidad excesiva de azúcares y grasas saturadas que perjudican a nuestro organismo.
La pirámide alimenticia de la SENC también incluye recomendaciones acerca del consumo de bebidas alcohólicas, que tendrá que ser ocasional y limitarse a mayores de edad. Por otra parte, los suplementos o complementos nutricionales como la vitamina D o la levadura de cerveza, que serán opcionales y bajo consejo de un experto en dietética.
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