¿Qué es la higiene alimentaria?
¿Alguna vez te has preguntado qué medidas de seguridad deben cumplirse en la producción y manipulación de los alimentos? ¿Conocías la importancia de la correcta conservación de productos para nuestra salud? ¿Sabes cómo evitar su contaminación? Si quieres resolver todas estas dudas, te invitamos a que sigas leyendo este artículo en el que te explicaremos qué es la higiene alimentaria y qué factores son determinantes para que ésta se cumpla.
Beneficios de la higiene alimentaria
Según la Organización Mundial de la Salud, la OMS, la higiene alimentaria es el conjunto de medidas que deben estar presentes durante todo el proceso de producción, almacenamiento, manipulación, transporte y conservación de un alimento para asegurar que éste se encuentra en las mejores condiciones antes de su consumo.
Es decir, el objetivo principal de la higiene alimentaria es la expedición de alimentos no contaminados. Para ello, es fundamental hacer un seguimiento exhaustivo de las condiciones higiénicas de plantas de producción y de manipulación de alimentos, ya que éstas son un foco de riesgo por la presencia de bacterias y alérgenos.
Por tanto, la limpieza y la desinfección de estos espacios es imprescindible para cumplir con la higiene alimentaria y prevenir la tan peligrosa contaminación cruzada.
Dicho esto, entre los principales beneficios de la higiene alimentaria podemos destacar la prevención de enfermedades causadas por un mal tratamiento del producto además del control de la contaminación por alérgenos.
Cumpliendo con todas estas medidas se garantiza que el consumidor final pueda alimentarse sin poner en riesgo su salud.
Factores a tener en cuenta para la higiene alimentaria
Dentro de la cadena de producción existen varios factores que hay que tener en cuenta a la hora de expedir alimentos salubres cuyo consumo no suponga un peligro. Entre los principales condicionantes destacamos: la temperatura de los alimentos, las condiciones de los productos almacenados, su manipulación y la desinfección de las instalaciones. A continuación vamos a conocer cada unos de estos factores:
La temperatura de los alimentos
Una temperatura correcta permite controlar la aparición y reproducción de bacterias. ¿Alguna vez has oído hablar de la cadena de frío? Se trata de un concepto muy importante que implica que los alimentos frescos tienen que estar refrigerados a temperaturas entre los 0 y los 5 grados mientras que los congelados deben mantenerse a 18 grados negativos.
Asimismo, además del control de temperatura en la conservación y el transporte de productos alimenticios hay que prestar especial atención a su correcta cocción.
Las condiciones de almacenamiento de los alimentos
Tal y como hemos mencionado previamente, en una planta de manipulación y producción de alimentos existen muchos riesgos que pueden afectar a las condiciones de almacenamiento. ¿Cómo evitarlos? Colocando los productos en lugares secos en los que no reciban luz directa y la temperatura sea estable.
La manipulación de los alimentos
Otro de los condicionantes que deben tenerse en cuenta en la higiene alimentaria es la manipulación de los alimentos. Cualquier trabajador de una empresa de productos alimenticios o cocina de un restaurante debe estar completamente formado sobre cómo manipular cada producto, siendo fundamental que aplique las directrices en todas las fases. Sólo de esta manera se garantiza la prevención de riesgos. ¿Qué medios son los más seguros? Equipos de protección desechables como batas, guantes, mascarillas y gorros. Asimismo, no hay que olvidarse de un correcto lavado de manos previo a la manipulación.
La limpieza y la desinfección de las instalaciones
Aunque no las veamos a simple vista, son muchas las bacterias que nos rodean en nuestro día a día. Por tanto, proteger las instalaciones de productos alimenticios mediante una limpieza y desinfección exhaustiva es primordial para que no surjan casos de contaminación cruzada.
Otro de los puntos clave, en lo que a los materiales de limpieza respecta, es su organización. Por ejemplo, separar los productos por tipología de tratamiento.
Como habrás podido comprobar, la higiene alimentaria es vital para garantizar que el ciclo de vida de un alimento no sufre ningún tipo de contaminación que pueda ser peligrosa para los consumidores. Su importancia es tal que muchos grados cuentan con asignaturas específicas en las que se estudian estas medidas preventivas, como es el caso del título de Técnico Superior en Dietética de la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid.